¿Qué es la Industria 4.0? La nueva revolución que se nos viene encima
Con este artículo se pretende aclarar cuáles pueden ser los beneficios de la industria 4.0 en las
empresas. Estamos hablando de un cambio de modelo, por lo que tenemos que
conocer cuáles son los retos que se avecinan, con su problemática asociada y
las ventajas que hemos identificado.
La conocida como industria 4.0 se
caracteriza por la incorporación masiva de la tecnología de la información a
toda la cadena de valor. ¿Cuándo podríamos estar hablando de esta integración
de la tecnología en el día a día de una compañía? Sería pues, cuando hablamos
tanto de los procesos de fabricación como de los procesos desarrollados para
hacer llegar esa fabricación al siguiente eslabón de la cadena, hasta llegar al
cliente/usuario final. En todas estas actividades estaría inmersa la logística
4.0.
La incorporación de la tecnología
de la información desembocará en una optimización e interacción de los procesos
de investigación y desarrollo, diseño, producción, logística y la prestación de
servicios asociados. Pero para poder exprimir al máximo las posibilidades que nos
ofrece la industria 4.0 a las empresas, es necesario un flujo continuo de
información a través de la compañía misma en sus distintos departamentos, como
en su proceso de fabricación o su ciclo de vida del producto. Es necesario que
este flujo se realice a través de interfaces estandarizados para que el 4.0 se
convierta en una revolución masiva, y así permitir la conectividad de los
distintos dispositivos de toda la cadena de valor.
Porqué el 4.0 significa una revolución para las empresas.
La industria 4.0 es un cambio de
paradigma, pues impactará en los modelos de negocio, los procesos y los propios
productos fabricados. El mundo hiperconectado, por ejemplo, permite la
comunicación con el producto cuando está en manos del cliente, y ofrecer a ese
cliente servicios adicionales de valor añadido. Lo que nos permitirá aumentar
el retorno que como compañía podemos obtener de un producto o servicio, a
través de los servicios adicionales relacionados con él. También puede
proporcionar información real y muy valiosa al fabricante, que servirá para retroalimentar
a su vez a los procesos de desarrollo de nuevos productos y servicios más
adaptados a las necesidades reales del usuario. Por lo que la proximidad a las
necesidades del cliente será cada vez mayor.
Desde el punto de vista de la
gestión, la conectividad en los procesos permite eliminar tiempos muertos e
intervenciones manuales (que en muchos casos no aportan valor), que podremos
sustituir por un flujo homogéneo de información vertical en todas las capas o
departamentos de la compañía.
Si estamos hablando del proceso
de fabricación, la conectividad permite alcanzar una total flexibilidad y adaptación
a lotes más pequeños y personalizados, con tiempos de respuesta más cortos
según las necesidades de nuestros clientes. Nos acercamos al arquetipo de
producción a la carta tan buscado.
Aspectos a tener en cuenta en la implantación de la logística 4.0
A pesar de que los términos
industria 4.0 y logística 4.0 se vienen escuchando desde hace tiempo, el tejido
empresarial nacional parece que no los ha aceptado del todo, ya sea por
ignorancia o miedo a los cambios que podría implicar. Lo cierto es que ese
desconocimiento provoca que no tengamos las ventajas que podría traernos a las
empresas.
De entre todos los factores a
tener en cuenta cuando queremos empezar a desarrollar el 4.0, cabe destacar
tres aspectos que devendrán fundamentales: la ciberseguridad, la conectividad y
las nuevas tecnologías de fabricación. A continuación, explicamos cada uno de
ellos.
Ciberseguridad. Se puede entender la ciberseguridad como un área
transversal y fundamental para el éxito de la implantación de la Industria 4.0.
Podemos afirmar que la utilización masiva de las tecnologías de la información
en los procesos empresariales, productivos e incluso en los productos o
servicios producidos, reportará enormes ventajas a la compañía. No obstante, el
uso de esta tecnología implica la necesidad de garantizar, de forma adecuada,
la protección de la información corporativa, y lo que es más importante para
las autoridades, la privacidad de las personas. Estamos en una fase de la
historia moderna en la que la información es uno de los principales activos de
una empresa. A todos nos vienen a la mente grandes gigantes de las redes
sociales cuyo valor reside únicamente en la asfixiante cantidad de datos que
acumulan de sus usuarios, y no en sus cifras de resultado. El compromiso actual
es garantizar su confidencialidad, integridad y disponibilidad en un mundo que
está permanentemente conectado. Este es el desafío real al que nos tenemos que
enfrentar. Aunque no seamos una red social, tendremos información sensible que
tiene que estar controlada (dejamos para otro artículo hablar del Cloud
Computing y las ventajas que puede acarrear para la logística).
Conectividad. Esta nueva revolución que cambiará el modelo industrial
y de relaciones entre sus agentes tal y como lo conocemos, descansa en un flujo
de información para el que todos los componentes que intervienen tienen que
estar conectados. En un mundo digital no solo es necesario que el producto o
servicio esté conectado, las nuevas necesidades de información harán que sean ineludibles
redes de comunicaciones de empresa mucho más potentes y más fiables. ¿Cómo
podemos conseguir que nuestras redes de comunicaciones asociadas a nuestros
procesos estén mejor conectadas? En primer lugar, dotándolas de una mayor
capacidad, pues tienen que controlar toda la planta en tiempo real con la
cantidad de transferencia de datos que ello implica. Qué ofrezcan una mayor
fiabilidad, pues estamos afirmando que manejarán información crítica y esencial
relacionada con la seguridad. Que puedan estar disponibles siempre que sea
necesario, ya que la producción depende de su funcionamiento. Y por último
otorgarles una mayor flexibilidad, porque el proceso productivo estará vivo.
Tenemos que conseguir que pueda adaptarse fácilmente a cambios en la
producción, ya sea en el número de lotes como a productos que respondan mejor a
las necesidades de los consumidores. Es decir, buscaremos una producción de
lotes más pequeños y más diversos.
Nuevas tecnologías de fabricación. Es importante detenerse en la
flexibilidad que anunciábamos con anterioridad. En muchos casos, parte de la
flexibilidad que se exigirá a los nuevos procesos, es debida a la se debe a la aparición
de las nuevas tecnologías, que permitirán pasar de un modelo de producción de
grandes lotes de productos iguales a pequeños lotes de productos personalizados
(lo mismo tiene que poder conseguirse con los servicios). El objetivo es llegar
a una fabricación de bienes individualizados en función de las características
de cada uno de los usuarios finales, pero a un coste para la empresa que sea
competitivo. Es por este motivo que consideramos que la robótica experimentará
un gran crecimiento entre las nuevas tecnologías de fabricación. Los robots se
dotarán de nuevas capacidades que interactúen no solo con su entorno, sino
también con el propio producto fabricado y, por qué no, con los usuarios del
mismo. También hay que tener en cuenta la impresión 3D, utilizada ampliamente
en la fabricación de prototipos en la actualidad, y aunque está avanzando
rápidamente hacia la producción del producto final, todavía está en proceso de
desarrollo. Como ventajas de las técnicas de impresión 3D dentro del proceso de
fabricación es que permite multitud de formas, texturas y geometrías, además de
una adaptación del producto a su uso. Este nuevo sistema de fabricación, evita
ciertas limitaciones imputables a los sistemas tradicionales. Desde el punto de
vista de la logística, la revolución de la fabricación mediante impresión 3D
vendrá por romper la cadena de producción global actual. El producto pasará a
poder ser impreso (producido) cerca del cliente. No será necesario tener
fábricas en la otra punta del mundo, lo que ahorrará costes y tiempo en la
cadena, y un acercamiento mayor a las teorías de la Green Logistics. Pensemos
que, en muchos casos, este pasará a ser un nuevo servicio que podrá ofrecer el
operador logístico a sus clientes.
La industria 4.0 y las pymes
Esta nueva revolución industrial,
les permite a las empresas un ahorro de costes, flexibilidad de la producción,
personalización de productos, posibilidad de ofrecer servicios de valor añadido
a los clientes, y todo ello sin recurrir a una gran inversión. Si lo traducimos
al tejido empresarial de pequeñas y medianas empresas, el acceso a estas
tecnologías les va a permitir gozar de posibilidades que hasta la fecha solo
podía plantearse grandes corporaciones internacionales. En principio cualquier
podría empezar a beneficiarse de su aplicación. Pero más allá de la
democratización de las tecnologías, la industria 4.0 facilita soluciones a las
pymes que a medida que vayan incorporando a sus procesos, les va a permitir una
mayor independencia de sus proveedores, eludir posibles bloqueos informáticos y
un crecimiento considerable de sus operaciones con el exterior. Se abre un
mundo de posibilidades que permitirá competir con los grandes en condiciones
equiparables si sabemos utilizar las ventajas de la 4.0.
-->
La industria conectada a Internet es un fenómeno transformador. Desde la fabricación hasta el comercio, la conectividad está impulsando la eficiencia, la innovación y la creación de oportunidades en todos los sectores.
ResponderEliminar